Pymes y tecnología en época de crisis

Se convierte en una oportunidad para diferenciarse y a su vez en un desafío que invita a empresarios y trabajadores a sumarse a tomar lo nuevo y salir de la “zona de confort”

Hoy en día para encarar cualquier tipo de actividad ya no resulta suficiente manejarnos con simples planillas de cálculo Excel. cada vez son más las exigencias a la hora de actualizar precios, facturar, manejar stock de nuestros productos, liquidar comisiones o analizar rentabilidades. cuando tenemos información tenemos poder. Tomamos mejores decisiones. siste- matizados podemos cambiar rápidamente estrategias cuando el contexto lo pide o analizar si vamos a perder plata en un cambio de cotización del dólar de un día al otro. En épocas de crisis nuestro negocio puede pasar en poco tiempo de: ser algo rentable a solamente “cambiar la plata” o aún peor sin información ordenada tengamos pérdidas sin saberlo a ciencia cierta. La crisis cada vez nos exige más. ¿qué estamos esperando para asumir que debemos buscar mas herramientas para digitalizar todo lo que nos sea posible en nuestro negocio? No resulta nada sencillo tomar decisiones de este tipo. Pareciera que nunca es el momento. Encarar una nueva implementación, aprender algo nuevo… nunca hay tiempo. Pero lo cierto es que, los que ya tenemos crisis vividas, debemos recordar que sólo sobrevivirán los más fuertes, los que están más preparados o los que supieron adaptarse antes a los cambios que se presentaron. Si nuestro problema es el desorden, la falta de información, la incertidumbre a la hora de buscar datos… entonces deberemos asesorarnos y analizar alternativas. Los sistemas hoy en día tienen implementaciones cortas, toman toda la información con facilidad y permiten modelizar a medida cuestiones de cada negocio en un un corto plazo.

Las últimas tendencias hablan además de la “gig economy” y cómo puede mejorar la eficiencia del mercado de trabajo. ¿De qué se trata? La gig economy nació en EEUU hace algo más de una década cuando el mercado laboral estuvo en crisis. El término gig sería algo así como una “actuación corta” y aplicado a la economía, más específicamente al mundo laboral serían una economía basada en trabajos de duración corta o limitada. En ese esquema la flexibilidad y la comunicación online son im- prescindibles y eso es algo que muchas de nuestras pequeñas empresas no tienen ni en la cultura, ni en las herramientas. Esto beneficiaría tanto a los empleadores como a los trabajadores ya que se reducirían los costos laborales permitiendo en muchos casos trabajar desde las casas pudiendo conciliar la vida laboral con la familiar, mejorar el uso del tiempo real al no tener que trasladarse, etc accediendo a distancia. Como conclusión creo que empresarios y colaboradores debemos asumir un rol más activo en temas de tecnología y, su- mando a nuestro personal más proactivo, animarnos a lo nuevo. La clave está en animarse. salir a buscar asesores para encarar con la mejor tecnología disponible las oportunidades de negocios que se presentan. así podremos crecer y sostenerlo a través del tiempo.